Gaditana, mi rosita temprana,
la flor más bella de Andalucía,
asómate a la ventana,
paloma del alma mía.
A cantarte, ¡ay!, lucerito mío
este tanguillo por alegría
y en tu reja floría
que de cositas yo te diría.
Y a los titi, titirimundis,
cielo, cielito te voy a llevar
y aunque tu mare ya no quiera
yo a tí te pago, pago la entrá.
Y aunque digan los fanfarrones,
los fanfarrones quieran decir,
yo te quiero y te adoro.
¡Ay! sentrañitas mias muero por ti.
Ya está el pájaro verde puesto,
mi niña puesto en la esquina,
esperando que pase cantando,
cantando la golondrina.
No desprecies mi canto tirana,
reina mía del corazón
Gaditana, gaditana,
la más bonita y galana de la nación.
Así decía la letra de uno de los tangos más importantes escritos hacia la mujer gaditana. Un piropo que con el paso del tiempo se ha ido quedando en un romanticismo solo apto para los corazones más tradicionales.
¿Dónde está mi Cai?, es la primera pregunta que me ha venido a la cabeza al ver el cartel del LXV Trofeo Carranza que se disputará los días 12, 13 y 14 de agosto en el estadio Ramón de Carranza.

La primera semifinal la disputará el Athletic Club de Bilbao frente al Club Deportivo Tacón. Las ‘leonas’ han sido quintas clasificadas en la última edición de LaLiga Iberdrola, mientras que el conjunto madrileño ha sido recientemente noticia tras su vinculación con el Real Madrid.
La segunda semifinal la disputarán el Tottenham Spurs y Real Betis. De traca. De auténtica traca. Bravo por Cádiz C.F. ¿Y nuestras chicas? ¿dónde está ese equipo femenino del que tanto nos orgullecemos?
Tras la reestructuración del fútbol femenino, el Cádiz Club de Fútbol jugará en Primera Nacional la nueva temporada 2019-2020. Y aún así no pueden jugar el trofeo de su tierra, de la ciudad que representan.
El Cádiz C.F. podría haber hecho historia, dando un ejemplo al resto de trofeos que se disputan en verano, pero no, tenía que hacer las cosas a medias. Podrían haber hecho un torneo femenino, con todas las de la ley, y se lo merecen, y yo ya estaba haciendo cábalas para intentar ver a mi Cádiz femenino, para apoyar el equipo femenino, para que las mujeres suban donde les corresponde, porque tenían tanto derecho como sus colegas masculinos a disputar un trofeo, probablemente el más atractivo de cuantos existen en el verano futbolero. Pero la decepción ha sido mayúscula, no solo para mí, basta con echar un vistazo a las redes sociales, han ardido, y con razón, porque pienso que es una falta de respeto tremenda el que el Cádiz femenino no se encuentre entre los equipos participantes.
¡Vaya piropo os salido!