Se abre el telón de la Liga Santander 2019-2020

Tras una de las pretemporadas más insulsas que se recuerdan, esta noche dará comienzo, como cada segunda quincena de agosto, una nueva temporada de la liga de fútbol español. Lejos quedan ya aquellas pretemporadas plagadas de grandes trofeos veraniegos en diferentes puntos de la península. Los Teresa Herrera, Colombino o Carranza son historia y lo que queda de ellos no es más que un triste sucedáneo. Ahora los clubes dedican el inicio de su preparación a prostituir su imagen disputando partidos en Norte América y Extremo Oriente a cambio de un puñado de dólares y poniendo en riesgo la condición física de sus jugadores. Este año, la principal víctima ha sido Marco Asensio, que se va a perder, cómo mínimo, la práctica totalidad de la temporada tras destrozar su rodilla intentando agradar a Zizou en un campo de NFL. Lo que no ha cambiado es la vorágine de fichajes del mercado veraniego. Si cabe, este año el zoco balompédico ha tenido más actividad que en los últimos años y la cifra gastada va a suponer un record. No obstante, a nivel organizativo la imagen de “La Liga” dista de ser la que debería, con multitud de guerras abiertas entre LFP y Federación e incluso entre los operadores televisivos y los árbitros. Ya se sabe, Spain is different.

Pero bueno, pasemos a lo realmente importante y veamos que podemos esperar de la nueva temporada de Primera División:

En la lucha por el título, el FC Barcelona parte como claro favorito. De Jong, Firpo y Griezmann vienen a reforzar una máquina engrasada y con unos pilares sólidos. Da la impresión de que el holandés va a tener un gran impacto desde el primer momento. En el caso de Firpo, viene a ser un recambio de calidad y, la estrella francesa es la que siembra más dudas a pesar de ser el fichaje de más relumbrón. Que a nadie le extrañe que se marque un Ibra y esté sólo un año en la ciudad condal. Si no eres del agrado de Messi, todo puede pasar. Por suerte para Antoine, los resultados probablemente acompañarán y se irá adaptando poco a poco a ser un segundo espada. No obstante, la máquina culé, tiene un punto débil: la línea defensiva. La obsesión por fichar a Neymar J.R. ha hecho que la dirección deportiva azulgrana se olvide de fichar a un central de garantías. Seguro que Valverde, aunque no lo vaya a decir públicamente, estaría encantado de tener un defensor más en su plantel.

El único (SÍ, EL ÚNICO) candidato a hacerle sombra a los catalanes es el Atlético de Madrid. Los rojiblancos parecen haber acertado de pleno con los fichajes y cada vez son menos los que se ríen de los 120 millones gastados en el adolescente Joao Felix, que apunta a der un híbrido de Messi y CR7. Además todo indica que aún queda un fichaje importante para reforzar el ataque cuando se concrete el traspaso de Correa.

Hazard

En un escalón inferior nos encontramos al Real Madrid. Muy mal lo tienen que hacer sus dos rivales para que los blancos no estén descartados para ganar el campeonato en enero. El club de Concha Espina es un barco a la deriva sin dirección deportiva y Zidane está demostrando que su excelente capacidad para gestionar un conjunto ya hecho es inversamente proporcional a su habilidad para crear un nuevo equipo y hacerlo funcionar. Prácticamente nada funciona bien en Chamartín. Courtois parece que va a ser el portero por decreto a pesar de estar a años luz de Keylor Navas. La defensa es frágil como un jarrón chino y es el mayor reflejo de la improvisación que está caracterizando la gestión de la plantilla merengue. De hecho, parece que van a jugar con tres centrales y sólo tienen cuatro. Si esto fuera algo planificado, Vallejo se habría quedado o habrían repescado a Mario Hermoso (clarísimo ejemplo junto con Llorente del limitado conocimiento de Zidane más allá de los jugadores francófonos). Si pasamos al centro del campo, la cosa se transforma en un serial de terror. Modric o Kroos bien podrían ser extras de The Walking Dead. Casemiro y Valverde hacen lo que pueden y… Zidane moja sus sábanas pensando en su mesías de ébano, Paul Pogba. Pero una golondrina no hace verano y el box to box francés no podría cambiar todo este caos por sí sólo. Finalmente, la línea de ataque tampoco genera demasiado optimismo. Hazard es una versión mejorada de los media puntas que ha tenido el equipo recientemente, pero se antoja insuficiente ante la consabida irregularidad de Benzema, la falta de puntería de Vinicius y la incomprensible desconfianza en Jovic sin haber podido ni verlo en acción aún. La única buena noticia para el Real Madrid es que entre el tercer y el cuarto puesto hay un abismo notable a priori. El Valencia es un equipo satélite de Jorge Mendes al que sólo sostienen Marcelino y Alemany. Si se confirma la marcha de Rodrigo, las cosas pueden ir muy mal en Mestalla. El Sevilla es una incógnita, ya que tras más de una decena de fichajes y con la presencia de Julen Lopetegui en el banquillo, todo puede pasar. La incertidumbre en estos dos equipos puede ser aprovechada por el Real Betis, que con los fichajes de Fekir y Borja Iglesias da un salto de calidad importantísimo.

En el siguiente escalón podemos situar a todos los equipos que, a priori, no deberían pasar apuros. Por ejemplo, el Celta de Vigo está recuperando multitud de hijos pródigos como Denis Suarez o Santi Mina. Aunque está por ver si no echan de menos a Maxi Rodríguez. El Athletic Club de Bilbao también parece candidato a vivir entre los últimos puestos europeos y la tierra de nadie, con Iñaki Williams como buque insignia, pero sin un sustituto para Aduriz en el horizonte. En la vecina San Sebastián tampoco se esperan grandes apuros y el danés Odegaard genera grandes ilusiones.

Las dos sorpresas de la pasada temporada, es decir, Espanyol y Getafe deben tener precaución, ya que normalmente jugar Europa League los jueves suele resultar indigesto para los equipos humildes y las consecuencias se ven en la tabla liguera. El Geta parece un equipo sólido y que puede salir airoso pero los periquitos pueden acusar la marcha de Borja Iglesias y tener problemas serios. En el mismo escalafón que Espanyol y Getafe podemos situar al Villarreal, que siempre es una quimera, ya que por plantilla y presupuesto podría luchar por clasificarse para Europa, pero sus antecedentes los sitúan en la segunda mitad de la tabla.

El resto de equipos, salvo sorpresa, pelearan por mantener la categoría. Puestos a hacer pronósticos, equipos como el Eibar, el Levante, el Alavés o el Leganés, suelen hacer gala de una gestión excelente y de un scouting impecable y puede que se salven de la quema, dejando la pelea entre el Real Valladolid y los tres recién ascendidos (Mallorca, Granada y Osasuna).

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